Cruce de flamenco y folclore argentino en "Vuelta y vuelta"

Los guitarristas Héctor Romero y Diego Gallo están al frente de la compañía y el espectáculo "Vuelta y vuelta" que se está presentando todos los domingos de julio y el 7 de agosto en el Centro Cultural Borges (Viamonte y San Martín) y en el que se cruzan las tradiciones musicales y coreográficas del folclore argentino y el flamenco.

"Esto es un diálogo de culturas, un espacio donde dos tradiciones se expresan con sus puntos de contacto y sus diferencias, se unen, se separan, conversan entre ellas", cuenta Héctor Romero sobre el espectáculo que, al mismo tiempo, oficia como presentación de un trabajo discográfico homónimo.

A lo largo del show se unen temas tradicionales del folclore argentino como "La tempranera", una versión de "Los ejes de mi carreta" en tiempo de flamenco, un homenaje a Astor Piazzolla pero en una bulería por tarantas y temas propios de Romero y Gallo.

En "Vuelta y vuelta" hay 15 personas en escena, un cuarteto de flamenco (guitarra, percusión, cante y flauta), un quinteto folclórico (guitarra, percusión, piano, bajo, voz) y seis bailarines, tres por cada lado.

"En la actualidad -señala Romero para marcar un universo de afinidades a veces desconocido- hay estilos argentinos como la milonga y la vidala que forman parte del flamenco y también muchas cuestiones de influencias melódicas y rítmicas".

"La copla, por ejemplo -precisa el guitarrista-, es una constante entre los dos géneros, al mismo Yupanqui se lo canta en Andalucía bajo la forma de coplas del cante y se lo canta como parte de una tradición propia, sin saber quién es".

El proyecto “Vuelta y Vuelta” se remonta a 1996, cuando el Chango Farías Gómez convoca a Romero para la grabación de su disco "Rompiendo la red", donde el líder de La Manija realiza el primer cruce de folclore y flamenco.

A partir de allí Romero queda interesado en ese diálogo y en 2002 junto al guitarrista de folclore Diego Gallo realiza el espectáculo "Eco de la tierra", limitado a la cuestión musical, hasta que con "Vuelta y Vuelta" se incorporan también las tradiciones del baile de las dos músicas, con trabajos coreográficos a cargo de Claudio Arias para el flamenco y Guillermo Kully Gómez para las danzas argentinas.

"Yo considero al folclore y al flamenco como primos hermanos, esa es la cercanía que habilita este encuentro, pero además está el trabajo creativo que le podemos dar a esto", relata Romero.

"Cada uno mantiene su esencia, cada uno toca lo que sabe, lo que fomentamos es mantener las esencias", destaca.

El guitarrista nacido en Mendoza, y que fue a abrevar de las fuentes del flamenco a España en un trabajo de investigación y aprendizaje, apunta que la complicidad del flamenco con las músicas argentinas no se limita al folclore sino que es, quizás, más fuerte en el tango.

"En España -cuenta- los cantantes gitanos cantan tango en flamenco como una cosa nueva del género; está el caso de El Cabrero, un cantaor de Huelva que vive en medio de las cabras en el campo y canta tango desde chiquito, porque lo aprendió de escucharlo en las fonolas a fichas de los bares del ferrocarril y lo incorporó a la tradición de su cultura".

Romero resalta que "El Cabrero" es un cantante purísimo y con un estilo impecable y suma a esta reunión de tango y flamenco el trabajo del bandoneonista Rodolfo Mederos con el cantaor Miguel Poveda y el último disco de tango de Diego El Cigala.

"La clave en todos estos cruces -resume Romero- es no forzar las alianzas, no intentar tomar la naturaleza del otro sino respetar las esencias y establecer el diálogo desde esta base".

 

Reproducción del comunicado de prensa de Telam